Hoy es 21 de octubre de 2015. Por fin Marty McFly ha llegado a nuestros días. Sí, señores, cuando se estrenó la segunda entrega de la peli allá por el año 89 (entrega en la que los protagonistas viajan al 2015) muchos de nosotros aún no habíamos nacido, y otros muchos éramos tan pequeños que no teníamos uso de razón. Pero son tantas tardes las que hemos pasado en el sofá frente a la tele viendo "Regreso al Futuro", que es imposible no haber esperado esta fecha con ganas, aunque sólo fuera por hacer la gracia.
La acción de la peli transcurre por el año 1985, y ya se comenta la idea de comercializar un viaje en el famoso Delorean, aunque en estos tiempos que corren...yo creo que más que un viaje al futuro lo preferiría al pasado (aunque sólo fueran unos años atrás). Sí,sí, no me llaméis loca. ¿Acaso ninguno de vosotros, mientras veíais Cuéntame o algún programa de esos que echan a veces en la tele, ha deseado vivir en los 80? A mi me gustaría retroceder a la época de La Movida Madrileña aunque sólo fuera por pasar una noche de locura en el Rock-Ola, o por vivir en persona los inicios del maestro, Sabina, en la Mandrágora, por sacar mis atuendos más estrafalarios a relucir sin que sea Carnaval o sin que la gente me mire raro, por vivir cómo España se llenaba de colorido, de desenfreno, de buena música... Esas noches de "Sexo, Drogas y Rock and Roll" que devolvieron la ilusión y la libertad a una España dormida.
Pero volviendo al tema que me ha llevado a escribir esta entrada (en posteriores capítulos os contaré más cositas de mi época preferida), Regreso al Futuro creó muchas espectativas de futuro (dada la redundancia) y todos esperábamos que algunas predicciones de la peli se hicieran realidad. Es más, yo creo recordar que algún año incluso, le pedí un aeropatín a los Reyes Magos. Obviamente, por muy magos que sean, no consiguieron hacérmelo llegar. Es más, el monopatín se ha vuelto a poner de moda, pero el convencional, el de toda la vida, y ahora son chiquillos con los pantalones a la altura de medio culo (o pantalones culo-cagaos como yo los llamo) los que lo cargan debajo del brazo. Se hace eco la noticia de que ya hay alguna empresa trabajando en el proyecto Hendo Hover, que consiste en un patinete sin ruedas que se logra mantener en el aire impulsado por campos electromagnéticos (un lío que para personas como yo, que siempre suspendíamos física y química en el cole, es muy difícil de explicar). La vida avanza, sí señor, pero a espera de que este proyecto vea la luz, de momento... volar lo que se dice volar... no vuelan.
Los coches tampoco vuelan en la actualidad, así que seguimos usando las carreteras convencionales. Y no me quiero ni imaginar la cantidad de gasolina que tiene que consumir un coche volador... Nada, nada, me quedo con mi Megane de siempre.
Seguimos repasando. ¿Qué más aciertos y desaciertos tuvo Robert Zemeckis, su director, al imaginarse cómo sería la vida en 2015?
Si Marty de verdad estuviera hoy por aquí y viera que las Nike no sólo es que no se abrochan solas con robocordones (aunque estoy segura que algún invento harán con los años para no tener que seguir agachándonos a atarlas), si no que encima nosotros en vez de innovar, retrocedemos a modas pasadas y encima lo llamamos "Vintage"...¡¡se subía al Delorean de vuelta!! Jajajajaja. Sí, Marty, hemos recuperado las Converse, Las Martins, las Air Max, las plataformas, los tacones anchos... Pero hay una cosa que no hemos logrado inventar, y es la ropa que se seca sola. Ya puestos a inventar... ¿por qué no la inventamos? Pero que se seque, se planche y se coloque en el armario sola.
Las puertas, al menos las de casa, se siguen abriendo con los picaportes de toda la vida, aunque sí que es verdad que cada vez las puertas son más seguras (y también los ladrones más listos, así que estamos en las mismas).
Verdaderamente lo que fue un gran acierto de la peli, fue el uso de la videoconferencia. Ahora forman parte de nuestro uso diario mediante Messenger hace unos añitos o gracias a Skype y otras aplicaciones de actualidad, pero en la época que se refleja en la película era un gran invento innovador. Sin embargo, el fax (elemento que también podemos ver en Regreso al Futuro y mediante el cual Marty recibía la notificación de su despido) ya está prácticamente desaparecido (como sus compañeros el cassette, el disquete, el VHS o el CD y DVD no tardando mucho).
Otro gran acierto de esta saga es el cine en 3D, aunque en la película no se refleja tal y como es en la realidad. Si lo recordáis, cuando Marty Mcfly llega a la plaza de Hill Valley, ve una secuencia de Tiburón. Creo que ya se llegaban por la película 19, otra cosa que tampoco ha ocurrido ni creo que ocurra. Pero quién sabe si otras sagas como En Busca del Valle Encantado, Saw o Torrente lo consiguen. No van por mal camino. Por cierto, he leído por ahí que Universal Studios también quiere celebrar esta fecha especial y va a lanzar un tráiler de Tiburón 19. Tranquilos, es un falso tráiler, no vais a tener que tragaros entre medias otras 14 nuevas películas del animal este año. Tendréis que conformaros con poner TVE algún sábado o domingo por la tarde, a ver si tenéis suerte y están poniendo la 1, la 2 o la 3.
Muy a nuestro pesar, las pizzas no crecen en el microondas (a quién le salga bien, tiene suerte si lo intenta con un bizcocho en el horno). Y ya hablando de alimentación, Pepsi también se quiere unir a los homenajes, lanzando en EEUU una edición limitada de botellas de Pepsi Perfect, el refresco que salía en la peli, aunque para mi economía, un poco caras.
En lo de pagar usando la huella del pulgar casi casi aciertan, pero de momento sólo podemos hacerlo pasando la tarjeta por delante de un lector (aprovecho para quejarme sobre este nuevo método que no me gusta nada).
Por cierto, en la peli se puede ver también a un enano Elijah Wood, hoy en día hecho todo un señor y sobretodo, un gran actor. ¿Puede que esta fuera otra de las predicciones que se han hecho realidad?
Creemos que ya está todo inventado, pero, cuidado, no vaya a ser que dentro de unos años vuelvan a sorprendernos. =)
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